Un rincón en Arcos al margen de la ley

Los dueños de un bar de la localidad gaditana de Arcos de la Frontera han creado, en un local anexo al negocio que utilizaban para celebraciones, un Club de Fumadores para aquellos clientes adictos a la nicotina que se han visto afectados por la Ley Antitabaco.

El local no dispone de camareros para servir bebidas o alimentos, sino que son los propios socios los que acuden al bar a comprar la bebida que vayan a ingerir. Para pertenecer al club sólo hay que abonar "dos euros al mes" e inscribirse en el registro de socios. A partir de ese momento, ha afirmado, "a fumar tranquilamente".

Por el momento, ha dicho, no han tenido ningún tipo de problema con la administración y tampoco se ha presentado ningún inspector de sanidad en el bar, por lo que no han tenido ningún tipo de problema al respecto.

La propietaria del negocio ha recordado que desde la entrada en vigor de la nueva ley el pasado mes de enero han notado las pérdidas porque al cliente le gustaba fumarse un cigarro mientras se tomaba "un café, una cerveza" o simplemente tras el desayuno y, en cambio, tenía que salir a la calle si quería hacerlo. Ahora, ha reiterado, "ya no tienen problema ninguno".

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