09 junio 2007

Gratos recuerdos

...Presencias benévolas me habían llevado de la mano, alzado en brazos, protegido la boca con una bufanda de lana antes de salir al frío, levantado el embozo hasta la barbilla antes de apagar la luz para que me durmiera, me habían traído al dormitorio en penumbra tazas de leche caliente con cacao y zumos de naranja cuando estaba enfermo, permitido que prolongara uno días más una convalescencia sin volver todavía a la escuela, me habían contado cuentos y cantado canciones, leído libros infantiles y tebeos con la voz dubitativa de quien no aprendió bien a leer en la infancia y separa con dificultad las palabras, confortado en la oscuridad, rescatado de las pesadillas de la fiebre, dejado tras la cortina de un balcón, en las madurgadas del día de los Reyes Magos, regalos modestos que me sobrecogían de dicha por el efecto mágico de su simplicidad: una pequeña pizarra, un pizarrín blanco de textura casi cremosa, una caja de lápices de colores y un estuche que al abrirlo desprendía un aroma de madera fresca matizado por el olor de la goma de borrar todavía intacta, una pelota de goma con los continentes, los océanos, las islas, los círculos polares, la cuadrícula de las longitudes y las latitudes, un coche de lata azul, un libro con un submarino o con un globo aerostático en la portada, o con una bala de cañón aproximándose a la Luna...

A. Muñoz Molina. El viento de la luna.

6 comentarios:

Anónimo dijo...
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AntonioCozar dijo...

Veo que te encantó el relato que colgó Lola.

Colabora en el blog cuando quieras.

Muito obrigado, Rodrigo.

Anónimo dijo...

quien es ese rodrigo?

CHL

Ale dijo...

rodrigo este no es del pais de andalucia, yo creo que es de mostoles

Sebastián Ordóñez dijo...

Rodrigo, no es el auténtico Rodri Jons, pero nos quiere vender camisetas, ja,ja,ja.

Lola dijo...

Ea, Rodrigo, a vender camisetas a los "baratos".